martes, 22 de diciembre de 2015

¡¿INCENDIOS EN INVIERNO?!

Durante este mes de diciembre en Asturias ha ocurrido algo sorprendente, y no me refiero al impacto que han causado en nuestro medio natural los incendios forestales (más que sorprendente es la crónica de una muerte anunciada) si no a la repercusión que han tenido en las redes sociales.

Se han escrito líneas y líneas condenado a los presuntos incendiarios, rogando por la lluvia, y compartiendo imágenes de impotencia y desolación. La sociedad es cada vez más consciente de que existe un problema, pero necesita toda la información posible para poder comprenderlo, y que algún día entre todos podamos atajarlo.

¿Cómo ha podido ocurrir esto?
En gran parte de la Cornisa Cantábrica, el mayor número de incendios ocurre fuera de los meses de máximo riesgo (verano), en concreto a finales de invierno, principios de primavera y de otoño. En estas épocas suelen presentarse cortos periodos de tiempo en los que las temperaturas se elevan ligeramente, y se mantiene un viento de componente sur muy seco. Si lo pensamos son las mismas condiciones que hemos tenido los últimos días, solo que desplazadas en el calendario y con un viento muy fuerte, superior al habitual. Estas condiciones hacen que la vegetación pierda humedad y esté en condiciones óptimas para arder, y que un pequeño foco que con otras condiciones podría haberse apagado solo, o fácilmente con los medios suficientes, se convierta en una seria amenaza.
El abandono de las zonas rurales, sumado a una política forestal prácticamente inexistente, implica que los incendios serán cada vez más difíciles de controlar por el aumento de su potencial para arder.

En cuanto a los medios de que disponemos para afrontar el problema, queda en evidencia que no son suficientes:
Por un lado los Bomberos de Asturias llevan meses manifestándose cada jueves, simplemente para poder mantener todos sus parques en funcionamiento ante la falta de personal.
Por el otro, las desconocidas cuadrillas forestales, trabajan de forma temporal, adjudicadas a empresas privadas a un precio mínimo. Tras realizar labores de desbroce durante horas, cuando se presentan emergencias tienen que acudir a los incendios. Lo hacen con una formación mínima en seguridad y con unos equipos de protección individual de la menor calidad que permite la legislación. Estas cuadrillas “invisibles”, tanto de tierra como helitransportadas, son los no reconocidos Bomberos Forestales. Algunas de ellas, como las BRIF, se mantienen desde hace meses en conflicto con las administraciones y empresas para reclamar unas condiciones mínimas que les permita desarrollar su trabajo. Otras, ni siquiera tienen la opción de manifestarse por la amenaza del despido.
A día de hoy en España, según en qué Comunidad Autónoma, podemos encontrar hasta un 80% del personal para la lucha contra incendios forestales en el paro, ya que la gran mayoría solo trabajan 3 - 4 meses en verano.

En cuanto a la causalidad, decir que prácticamente la totalidad de los incendios del noroeste peninsular son de origen humano. Algunos de ellos por negligencias y otros muchos intencionados, por motivos tan diversos como son; desde la venganza, las desavenencias vecinales, a las enfermedades mentales (estos son los pirómanos propiamente dichos, que suponen menos del 10% de los incendios intencionados), pasando por una “cultura del fuego” mal aprendida que destruye bosques en lugar de regenerar los pastos.

Lo cierto es que los incendios forestales representan un problema complejo, el cual sólo puede afrontarse de forma efectiva integrando varios aspectos en un mismo planteamiento:

  • Una política forestal que permita poner en valor a nuestros bosques, haciendo que la gente obtenga beneficios tanto directos como indirectos de los mismos.
  • Una educación ambiental que realmente nos ayude a valorarlo y comprenderlo en toda su complejidad.
  • Y un dispositivo de prevención y extinción de incendios permanente. Que mantenga las labores preventivas básicas (que son muchas) durante las épocas de menor riesgo, y así tenerlos a todos disponibles y bien preparados cuando más se les necesite.

Espero que esto sirva para ayudar a que la gente sea más crítica con el tema, animándola a recabar información de fuentes fiables. Y que cuando en los próximos días comparezcan nuestras autoridades para hablar sobre estos incendios, nos preguntemos si realmente la situación que nos exponen se corresponde con la realidad, y si sus propuestas no son un simple parche para aplazar el problema durante unos cuantos años más.
Gracias a todos por valorar y querer defender lo que nos es tan preciado. Nuestro paraíso.

Noel López García.
Ingeniero de Montes.

miércoles, 21 de octubre de 2015

Bomberos, ¿Empresa privada?

AUTORA: IDOIA SANTORCUATO

Empezaré por decir que soy una ignorante en la materia….que casi hablo por boca de ganso.
Pero déjenme expresarme sólo como ciudadana de a pie, como usuaria de este servicio.
Ando un poco preocupada por los muchos titulares, artículos, reportajes y manifestaciones del Cuerpo de Bomberos.
Concentración de Bomberos en Valladolid
Tenemos que tener en cuenta que para los ciudadanos los bomberos son esos señores con ropa aparatosa, un camión rojo enorme que te bloquea la calle y monta un lío de tráfico descomunal, una manguera en la mano y, que casi siempre nos cabrean porque para nosotros llegan cuando Cristo ya repartió el pan en la última cena.
Permítanme que me tome una pequeña licencia al conocer el sector un poco más en profundidad, aunque nunca lo suficiente.
Yo podré estar metiendo datos en el ordenador y hablando por teléfono con los clientes todo el puñetero día… pero hasta ahí llega mi aportación a la sociedad empresarial.
La cosa cambia cuando escribo la palabra BOMBERO.
Que se juegan la vida en cada intervención…. SI
Que el entrenamiento es diario… SI
Que la formación y los conocimientos no cesan hasta el final de sus carreras… TAMBIÉN.
Hasta aquí todo claro… un sector al servicio de los ciudadanos, con unos profesionales expertos en proteger y salvar la vida de los demás.
Un servicio que costeamos y que así entendemos que tiene que ser, con nuestros impuestos.
Mi temor cada día se está acrecentando al ver la absurda idea, de no sé, que cabeza pensante de privatizar el sector.
¿Dónde ve un empresario privado negocio aquí?
¿Dónde irán entonces nuestras partidas presupuestarias si ya no las reciben los bomberos? “……………………….”
¿Alguien le ha explicado a los ciudadanos lo que cuesta un camión autobomba, un camión autoescala, una cizalla para rescatarnos del amasijo de hierros en un accidente, un casco seguro, un chaquetón y unos pantalones ignífugos, la botella de oxígeno y la máscara (equipo ERA), unas botas, unos guantes, una manguera... Y eso sólo como ejemplo de todo el material necesario para realizar una intervención con éxito. Ya, ni hablo de las instalaciones donde pasan más horas de su vida que en sus propias casas.
¿Cómo pretende una empresa privada gestionar y mantener un servicio con una calidad máxima, cuando el objetivo es sacar beneficio del negocio?
¿Cómo?
¿Multiplicando por mil las facturas a los clientes del servicio? (víctimas de los siniestros de toda la vida)
¿Sin dotar de equipamiento adecuado?
¿Sin dotar de material?
¿Sin formación continuada?
Bomberos de Bilbao en una actuación
en el barrio de Otxarkoaga
¿Pagando nóminas de 750 € al mes? (que son muy populares entre los empresarios)
¿Sin dotar de medidas de seguridad a sus trabajadores?
¿Cerrando parques?
No me sorprendería leer en la prensa que alguna empresa propietaria de un parque de bomberos convocara un ERE y un concurso de acreedores por no salirle rentable el negocio.
¡Se me eriza la piel!
Seguramente éste artículo que tan sólo es una humilde reflexión personal, terminará en la papelera digital, ¡lástima!, porque es lo que nos espera a los ciudadanos si no somos capaces de entender, que si la sanidad tiene que ser pública, los servicios de bomberos también.
No tengo padre, hermano ni primo bombero…. Pero gracias a Dios, si tengo algunos amigos bomberos…. Y lo que no quiero para mí….
NO LO QUIERO PARA ELLOS.

viernes, 9 de octubre de 2015

Yo apoyo a los bomberos forestales | #YoApoyoALosBBFF

Imagen de apoyo a los
Bomberos Forestales
El pasado martes 6 de octubre, lanzamos la campaña "Yo Apoyo a los Bomberos Forestales" a través de las redes sociales.
Esta campaña pretende concienciar a la gente de que hay personas que se juegan la vida en los incendios forestales, gente que cuida de nuestros montes y que no permiten que el fuego arrase con todo, incluso tu casa si vives en un entorno forestal. Porque se merecen una categoría profesional, porque se merecen un salario digno, porque se merecen un futuro digno, porque son BOMBEROS FORESTALES!

¡Sube la foto a tu perfil y redes sociales, comparte, difunde! Con el Hashtag #YoApoyoALosBBFF




lunes, 12 de enero de 2015

Campaña de Incendios Forestales 2015 | Batallón T-15

Hemos iniciado la campaña de incendios forestales 2015. Este año optando por el lema "Yo quiero verte mañana" dirigida a todos los bomberos y a nuestros bosques. Queremos estar todos, queremos ver a todo el personal después de cada incendio y a su vez, ver el bosque tal y como lo vemos cada día.
La concienciación de prevenir los incendios forestales es muy importante, un descuido, una imprudencia puede poner en peligro muchas vidas humanas, muchas especies de animales y nuestros bosques.
Aunque aún estemos a principios de año, la concienciación para prevenir los incendios forestales hay que hacerla durante todo el año, y más este año que hemos empezado "movidito".
Agradecer de todo el equipo de Batallón T-15, al grupo ‪#‎InFuEs‬, Ángel Lorenzo Gutiérrez y David Deseo por sus aportes.
Esperemos que os guste! #YoQuieroVerteMañana